El año que terminó volvió a ser otro de los más difíciles para Norte de Santander en materia económica, pese a las promesas y los reiterados anuncios del Gobierno Nacional.
Las vías para generar competitividad siguen intransitables y los recursos para inversión no despegan.
Aún así, las miradas del Ejecutivo se mantienen distantes y las obras prometidas todavía no empiezan a traducirse, a pesar de que ya se cumplen dos años del actual gobierno.
De esto es consciente el senador conservador Iván Clavijo, quien una vez más reprochó la actitud esquiva que ha mantenido el presidente Juan Manuel Santos con las problemáticas de la región, a pesar de la insistencia de los distintos sectores.
Aún así, el dirigente mantiene la esperanza de que el próximo año lleguen por fin las noticias buenas para la región, sobre todo en materia de infraestructura vial.
¿Quedó algo positivo para Norte de Santander en el semestre legislativo que terminó?
Para mí, como senador de Norte de Santander, lo más importante fue el tema del gas. Fue un proceso muy largo, de casi año y medio, tratando de convencer al Ministerio de Minas y al presidente de Ecopetrol que del gas de Toledo, destinara una parte para servirle al departamento. Hoy puedo decir con propiedad que la planta que está en el pozo Sardinata (Tibú), va a producir, a partir del 13 de febrero, 5 millones de pies cúbicos de gas. Cuando fui hace un mes a visitar la planta ya estaba produciendo más de un millón trescientos mil pies cúbicos de gas. Eso es muy importante para la ciudad pues existe la posibilidad de que se pueda ampliar a cinco millones de pies cúbicos de gas. Eso permitiría que el problema que tiene Cúcuta y el área metropolitana de no tener gas, se pueda superar y así lograr su desarrollo industrial.
¿Pero a Cúcuta ya le empezó a llegar gas?
Si. Yo mismo revisé los relojes, pues estaba tan desconfiado que le exigí al presidente de Ecopetrol una inspección ocular para revisar el funcionamiento de la planta. Lo que viene ahora es socializar con los empresarios cuánto gas necesitan para que el que ya se está produciendo lo utilicemos para nuestras industrias y destinar otro para el consumo de los hogares.
¿Finalmente la Provincia de Pamplona también recibirá parte de ese gas?
Después de un proceso que contó con la ayuda del presidente Juan Manuel Santos, el Ministerio de Minas, en compañía de Ecopetrol, tomó la decisión de destinar parte del gas de Gibraltar, en Toledo, a la Provincia de Pamplona. Esto quiere decir que hoy tenemos asegurado el gas de Toledo, Labateca, Silos, Chinácota, Herrán, Ragonvalia y Pamplona.
Las vías siguen siendo el otro dolor de cabeza de los empresarios de la región, pero a la vez el tema más ignorado por el Gobierno, ¿se logró algo al respecto?
Este es otro de los temas en los que hemos trabajado con mucho juicio y sobre el cual tenemos una gran esperanza de que en abril podamos darle una buena noticia a la gente del departamento. La idea es que en las concesiones que se van a hacer en ese mes, quede incluida definitivamente la vía al mar. Esto es algo en lo que tenemos mucho interés, pues no hay que olvidar que la vía Astilleros-Tibú, Tibú-Convención-El Tarra-La Mata es red secundaria. Lo que necesitamos es que el próximo año el Gobierno la convierta en red primaria, asuma su responsabilidad y sea entregada a una concesión grande que pueda contar con el dinero para terminarla. Lo otro es la vía a Ocaña y Cúcuta-Bucaramanga que va a ir en una sola concesión. Este es un trabajo que hemos hecho con mucho juicio y con muy buena voluntad, insistiéndoles al presidente Santos y a los ministros que tomen decisiones que reactiven la economía del departamento pues estamos en una delicada recesión.
Otra de las esperanzas que tenía el departamento en 2012 era el Conpes para el Catatumbo, sin embargo, se acabó el año y este nunca se firmó, ¿qué pasó?
El Conpes ha tenido seis fechas. A la subdirectora de Planeación Nacional le insistimos mucho en el tema, pero siempre algo se presentaba en el camino. Cuando lo iban a firmar en agosto se enfermó el presidente, luego vino el fallo de La Haya y el problema con Nicaragua. Por eso, en una oportunidad que me preguntaron qué le pedía al Niño Dios de regalo dije: primero, que el presidente nos dé la cita que le pedimos hace rato los 12 congresistas de Norte de Santander, y lo otro que nos firmara el Conpes. Esta fue una labor de año y medio por parte de todos los congresistas y aunque ya está terminado no se ha firmado, necesitamos que el presidente saque ese tiempo. El problema es que ya no solo es el Catatumbo, sino que el problema se nos está agrandando y hoy requerimos un Conpes para todo Norte de Santander.
A propósito de la cita que la bancada de congresistas de Norte de Santander le pidió al presidente hace ya varios meses y no se las ha otorgado, ¿cree que este es otro desplante del Gobierno con la región?
Si, no tengo la menor duda. Al presidente le ha faltado entereza con Norte de Santander. Hace 15 días se lo dije hablando con él amigablemente en una reunión social con la bancada conservadora. Le insistí en que llevamos muchos días esperando esa cita con él, para contarle lo que está pasando en el departamento y que tome decisiones importantes. Él tomó atenta nota y le pidió a su secretario general, Juan Mesa, que concretara un espacio para la cita. Aún así, creo que ha habido mucha falta de entereza, por parte del Gobierno Nacional con el Norte de Santander, pues hoy el departamento necesita más que nunca que la economía reaccione, que se tomen decisiones. Mire no más que se fueron seis meses para el Conpes del Catatumbo y el presidente ha sido esquivo con eso.
Reforma tributaria
En la recién sancionada Reforma Tributaria se propusieron algunos beneficios para Norte de Santander, ¿en definitiva qué le queda a la región con este proyecto?
Se puede destacar una norma que, entre otras cosas, tengo que reconocérsela al doctor Chacón (Alejandro Carlos, representante a la Cámara), que insistió mucho en el tema de la devolución del IVA a los extranjeros. Nosotros aspirábamos a más cosas, no solamente que fuera para los extranjeros sino un tratamiento especial al Norte de Santander. Sin embargo, el ministro de Hacienda fue muy celoso en incluir normas especiales para departamentos porque si no terminarían todos pidiendo y por eso en esta Reforma solo podemos resaltar ese hecho.
Esta reforma desató una fuerte polémica no solo entre los colombianos sino entre los mismos partidos, aún así fue aprobada, ¿cómo lo lograron?
Yo si me siento muy satisfecho con esta nueva reforma. Hoy tenemos un nuevo país, que lo vamos a empezar a sentir en los próximos meses. Lo que se busca con esta reforma es la equidad, la igualdad, formalizar el trabajo de los colombianos. Indiscutiblemente los parafiscales eran muy costosos para hacer empresa en este país y muy costosos cuando la empresas se estaban formando. Al eliminarlos se va a formalizar el trabajo. Además, el proyecto tiene aspectos sociales muy importantes y en ese sentido resalto el acuerdo que hicimos todos los partidos para aprobar la reforma. Vamos a fortalecer la universidad pública que ha sido esquiva para los colombianos. Pensamos en el tema de salud que está atravesando un proceso muy difícil; en el campo, la niñez, las madres comunitarias también van a ganar por fin un salario mínimo.
Pero en cuanto a los parafiscales el Sena y el Instituto Colombiano de Bienestar Familiar no quedaron muy conformes con esta reforma…
Nosotros dejamos muy claro que está garantizado el presupuesto para el Sena y el Bienestar Familiar. Incluso, buscamos fortalecer también las empresas. Disminuimos las ganancias ocasionales del 35% al 10%, para lograr que esos colombianos que se han ido del país y tienen sumas muy grandes fuera de aquí inviertan en Colombia.
Esta es una reforma revolucionaria, una reforma que busca la igualdad y la equidad de todos los colombianos.

No hay comentarios:
Publicar un comentario